La Fed se prepara para reducir las tasas de interés
Los datos de empleo en Estados Unidos presentan una realidad preocupante. Recientemente, se dieron a conocer cifras que muestran una drástica caída en la creación de nuevos puestos de trabajo. Mientras se esperaban alrededor de 75.000 empleos, solo se registraron 22.000, lo que se convierte en el segundo peor resultado del año.
Este panorama no pasa desapercibido para los analistas. Muchos consideran que la Reserva Federal (Fed) se verá obligada a revisar su estrategia en la próxima reunión del 17 de septiembre, moviéndose de un enfoque de control de la inflación a uno más flexible, buscando amortiguar el impacto en el mercado laboral.
Los datos de julio también se ajustaron un poco hacia arriba, subiendo a 79.000 desde una cifra preliminar de 73.000. Sin embargo, el índice de desempleo ha aumentado del 4,2% al 4,3%, algo que se esperaba. Un dato alentador es que la participación laboral subió ligeramente del 62,2% al 62,3%, pero los salarios se mantuvieron estables, creciendo un 0,3% mensual, como se preveía.
A la luz de estos acontecimientos, se siente un enfriamiento palpable en el mercado laboral. Hasta agosto, se habían creado 833.000 empleos en total, lo que representa una caída del 48% en comparación con el mismo período del año pasado. Especialmente preocupante es que en los últimos tres meses se generaron apenas 114.000 empleos, una disminución del 73% en relación con el año anterior.
La certeza para el mercado
Desde Balanz, señalan que los datos de inflación de agosto, que se revelarán la próxima semana, podrían influir significativamente en las decisiones de la Fed. Se espera que el informe de empleo de esta semana incline la balanza hacia un recorte de tasas de 25 puntos básicos en su próxima reunión.
Los pronósticos indican que prácticamente un 98% del mercado espera este ajuste en las tasas de interés. La incertidumbre es alta, y es claro que estamos en un momento decisivo para la economía estadounidense.
El dilema para la Fed
Theo Sojo, desde Sailing Inversiones, comenta que, aunque el desempleo se mantenga en 4,3%, la conexión habitual entre la pérdida de empleos y el incremento en las tasas de desempleo señala que podríamos estar cerca de un cambio de tendencia. Además, el crecimiento salarial también muestra señales de desaceleración, lo que refuerza la idea de un enfriamiento en el mercado laboral.
Se encuentra, entonces, un escenario complicado para la Reserva Federal, que debe equilibrar la rápida desaceleración del mercado laboral con la permanencia de la inflación aún por encima de lo deseado. La situación es delicada y requerirá una atención cuidadosa en las decisiones futuras.